Septiembre 2011, hasta la última campanada ritual de este fin de año en Brighton, U. K.
Ahogaré en lo más profundo del mar, todas las lágrimas.
Nelson en el Pier de Brighton. Foto y collage míos |
Nunca había regresado en invierno a Inglaterra, nunca desde los gloriosos 60 cuando vestida de negro sofisticado me pintaba los ojos a más no poder y los labios de rojo sangre por primera vez lejos al fin del alcance de mis padres.
Así vestida fui al Covent Garden. Quién no se atreve a los dieciséis años a disfrazarse de femme fatale unas horas para ver de cerca a Margot Fonteyn y Rudolf Nureyev bailar Romeo and Juliet. Después fui a cenar con un gran amigo de la familia llamado Archie.
Archibald Probart-Jones era un dandy auténtico de avanzada edad con mucho encanto yo una doncella que por todo y por nada se sonrojaba. Estuvimos en un restaurante de Chelsea en forma de galeón, cenamos sopa de aleta de tiburón y perdices al coñac.
No recuerdo el postre. Archie me dejó en la residencia poco antes de medianoche en Wimbledon. Sister Mary Catherine estaba esperando llena de sonrisas en la puerta de la entrada cuando llegamos.
Pero esos eran otros tiempos. Ahora estoy muy cerca de Wales y de Merlin donde
Camelot existe y la espada de Excalibur también.
Llueve una ansiada lluvia.
Me envuelve un sueño del que no quisiera despertar.
Este año en la mesa redonda de Brighton para celebrar el Solsticio de Invierno y el último día del año han llegado todos los caballeros y todas las brujas de casa.
Juntos en pagana procesión hemos quemado el tiempo y los relojes como reza la tradición
Bajando por St. James Street anochecía y arreciaba el temporal.
Un joven con su perro dormían a la intemperie entre dos portales tumbados sobre una colchoneta cubiertos de plástico y del montón de periódicos empapados de agua.
De un Pub salía la voz de Louis Armstrong en alto contraste.
Say nighty-night and kiss me
Just hold me tight and tell me you'll miss me
While I'm alone and blue as can be
Dream a little dream of me ...
Stars fading but I linger on dear
Still craving your kiss ...
Sweet dreams that leave all worries behind you ...
Luego cerca de Churchill Square donde todos bailábamos con todos un perfecto desconocido con pinta de espía de Le Carre y voz profunda me ha abrazado y susurrado al oído Cheers love !
Brighton 2012
Nelson Villagra Garrido ( El Conde ) en La Última Cena, de Tomás Gutiérrez-Alea Tomás Gutiérrez-Alea Nelson Villagra Garrido es chillane...