viernes, 17 de febrero de 2017

Maite



Lord George F Watts,   Orpheus and Euridice




Se llamaba Maria Teresa. 

Maite fue una mujer muy valiente. Murió de cáncer cerebral cuando de verdad empezaba a vivir.
Viajó a Montreal en pleno invierno desafiando todos los miedos e inconvenientes para estar unos días con sus hijos Julio y Mirentxu y ver nacer a Lander su primer nieto. 
Viajaba entre una y otra sesión de quimioterapia, Cuando regresaba  a Mundaka, quedaba su alegría. 
La veo todavía  yendo  las dos, ella y yo a la Ópera en Place des Arts, esquivando  socavones de nieve muertas de risa yendo. Era muy joven cuando su marido la abandonó con tres hijos pequeños y tuvieron que  recorrer los tres un largo y doloroso camino.  Se me olvidó llorar, decía.

Después encontró el gran amor en un hombre que la quiso mucho. Se casaron igual que en los cuentos con final feliz. Él la sigue amando. Maite era generosa y buena. Recuerdo el brillo que tenía en la mirada y su hermosa cabellera de castaño brillante.

Nadie la oyó quejarse ni perder las ganas de vivir en su lucha contra el cáncer. 
Había resistido y superado radioterapias salvajes cuando se fue.  
Desde las ventanas de su casa en Mundaka junto al puerto más chiquito y más bonito del mundo se ven las olas y el vaivén de las mareas. Siempre huele a sal. 
En el piano un hombre enamorado, muy solo sin ella, interpreta Alfonsina y el mar para Maite, la preferida de su mujer amada. Ella nunca falta a la cita. 
Martín Gondra lo sabe. 
Cosas que pasan cuando se quiere de veras.

“ tête à tête “ con Nelson Villagra Garrido para La Revista CineCubano

Nelson Villagra Garrido  ( El Conde ) en  La Última Cena,  de Tomás Gutiérrez-Alea Tomás Gutiérrez-Alea  Nelson Villagra Garrido es chillane...